Aunque parecía que el buen tiempo no quería abandonarnos, poco a poco se va notando el frío. Con este tiempo, no hay nada que más me apetezca que pasar el día en casa en compañía de familia y amigos.
Hace poco una amiga me contó que ella hacía castañas asadas en casa, y recordé en la cantidad de veces que he comprado por la calle castañas recién hechas y he pensado "seguro que no es difícil hacerlas". Hoy, he decidido probarlo.Además de estar buenísimas, si tienes niños disfrutarán ayudando en la cocina.
Las castañas asadas puedes prepararlas de postre o de merienda, perfectas para esas tardes en familia típicas de estas fechas, también pueden ser una combinación perfecta para algunos platos. Si nos sobran, se pueden guardar en un recipiente hermético en un lugar fresco.
INGREDIENTES
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- castañas frescas
- sal
PROCEDIMIENTO
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Lo primero que tenemos que hacer es lavar las castañas bien con agua. Una vez están limpias, tendremos que hacer un corte lateral con un buen cuchillo, es preferible hacer un corte en forma de cruz de manera que luego sea más sencilla pelarlas.
Para asarlas vamos a utilizar una sartén apropiada. Éstas, están perforadas en la base. Ponemos las castañas en la sartén previamente calentada un poco, y echaremos un poco de sal, en función del gusto de cada uno. Es conveniente tapar la sartén con una tapa adecuada para que se tuesten más rápido. Una vez que estén tostaditas podemos pincharlas para ver si están listas y sacarlas.
¡Y esto es todo! ahora a disfrutarlas
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